One Direction continúa con su gira por Australia y Nueva Zelanda y la emoción de poder ver de cerca a los chicos se apodera de las directioner. Es por eso, que ni el propio Liam Payne escapa de ser espiado.
Y como no todo es cantar, Liam Payne aprovecha el tiempo para ejercitar sus músculos y qué mejor forma que tomar una clase de box. Sin embargo, esto fue interrumpido por un grupo de directioners.
A pesar de sentirse acosado, Liam Payne solo optó por mantener la tranquilidad y continuar con su rutina de ejercicios peor llegó un momento donde prefirió retirarse del recinto para evitar cualquier alboroto.
No hay comentarios:
Publicar un comentario